Felicidades mamás

Nos podéis ni imaginar la de vueltas que dí antes de saber qué hacer porque ninguna de las ideas que veía me parecían adecuadas. Buscaba algo que las mamás pudieran usar (por lo que se eliminaban todas las opciones de cositas para adornar la casa o el lugar de trabajo) y que además, y lo más importante , que resultara sencillo de hacer para los niños.

Así que después de algunos días me decidí, haríamos un espejito para el bolso . La parte difícil ya estaba hecha ,o eso creía yo pues lo más complicado fue encontrar los espejos que necesitábamos. Rebusqué sin éxito en tiendas de manualidades , en Internet y cuando estaba ya a punto de desistir  , encontré una cristalería que se comprometió hacérmelos al tamaño que yo le pedía . Como siempre mis pequeños artistas han hecho un trabajo excepcional , han cortado y pegado con sumo cuidado para que el resultado fuera el esperado.

Pero las mamás se merecen lo mejor así que teníamos que completar el regalito con algo más. Una flor y una poesía serían perfectas para la ocasión. Para los que duden de las posibilidades de sus hijos , aquí tenéis la prueba de que con las instrucciones precisas y con la calma adecuada, son capaces de hacer cualquier cosa.

                                          

La poesía que se han aprendido los chicos tiene un significado muy especial porque esas mismas palabras fueron escritas un año para mí. No sé si fue el momento , no sé si fue la realidad que vivía en aquella época pero sí sé que jamás he olvidado el momento en el que mi hija me hizo ese regalo. Espero que os guste tanto como a mí .

Hoy me he levantado con sentimientos contradictorios. Por un lado feliz porque soy mami pero por otro lado, con la tristeza de saber que no estoy con la mía. Yo no sé lo que tienen las madres pero los abrazos de la mía calman mi alma, sus besos rozan siempre mi corazón y sus palabras siempre dan con la clave de mis inquietudes.  Cuando estoy a su lado tengo una tranquilidad inmesa y me siento simplemente querida. Daría lo que fuera por ser para mi hija al menos la mitad de lo que tú significas para mí. ¡Feliz día ,mamá!